Un intento de robo en una residencia local tomó un giro mortal cuando el ladrón recibió un disparo en un ojo por parte del dueño de la propiedad, un hombre de 75 años y experimentado instructor de tiro. El trágico incidente ha generado un intenso debate en las redes sociales sobre si el “justiciero” debe quedar libre o ser detenido.
Sin dudarlo el hombre tomó su arma de fuego y, en un acto de autodefensa, disparó contra el intruso, alcanzándolo en el ojo izquierdo. El ladrón cayó al suelo y, a pesar de la rápida respuesta de los servicios de emergencia, no logró sobrevivir a sus heridas, falleciendo en el lugar de los hechos.
El incidente ha suscitado un intenso debate en las redes sociales y en la comunidad local. Mientras algunos argumentan que el propietario tenía derecho a defender su hogar y su vida, otros cuestionan la decisión de disparar al ladrón en lugar de buscar una solución menos letal.