Romina Goitía, una joven argentina , junto a su pareja Máximo, se encuentra inmersa en un proceso judicial tras haber sido presuntamente estafada por tres profesionales de la salud en una clínica de fertilidad. Lo que inicialmente parecía ser una esperanza para la pareja, terminó en una desilusión que los ha llevado a buscar justicia contra los responsables.
Los acusados en este caso son la médica Paola Rita Cano y su esposo Juan Pablo Pilili, licenciado en Biología, propietarios de la clínica de Medicina Reproductiva Eclos en la ciudad de La Plata. Se les imputan los delitos de “estafa, falsificación de documento y uso de documento falso, en concurso real con ejercicio ilegal de la medicina”.
La pareja, llena de expectativas, recurrió a la clínica en busca de soluciones para concebir. Romina Goitía relató que tras una consulta con la doctora Cano, se le indicó reposo y cuidados para que el tratamiento fuera efectivo. Con alegría, compartieron la noticia con la familia, pero la felicidad se desvaneció cuando, semanas más tarde, el ciclo menstrual de Romina continuó.
La joven, convencida de que algo estaba mal, solicitó los resultados de los exámenes, pero la clínica afirmó no tenerlos en su posesión. La esperanza se desmoronó al comprobar que el tratamiento no había dado resultado.
Romina Goitía, indignada, alega que el modus operandi de los acusados era la captación de personas vulnerables, abusando de la necesidad de concebir. “Su modus operandi era la captación de personas como yo, vulnerables, abusando de la necesidad de engendrar”, sostuvo la afectada.
Ahora, la pareja busca justicia en el sistema legal argentino, mientras la comunidad espera que se esclarezcan los hechos y se tomen medidas contra aquellos que jugaron con las esperanzas y emociones de quienes buscaban cumplir el sueño de ser padres.
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