La Comisión de Fiscalización del Consejo Provincial de Pichincha ha decidido archivar la investigación vinculada a Soledad Padilla, exfuncionaria de la Prefectura, tras no encontrar irregularidades sustanciales en el caso.
El ente administrativo justificó esta determinación al señalar que no se hallaron elementos que evidencien irregularidades en las actividades desempeñadas por Padilla.
La solicitud inicial para investigar a Soledad Padilla fue realizada por el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, y el alcalde de Rumiñahui, Fabián Iza, quienes solicitaron indagar en las actividades y funciones de Padilla Morán durante su tiempo en la Prefectura.
Desde la Dirección Administrativa de la entidad, se informó que la Contraloría General del Estado ha realizado 44 exámenes especiales a la gestión de la prefecta Paola Pabón, cuatro de ellos centrados en temas de talento humano, todos los cuales han sido solventados cumpliendo al 100% con las recomendaciones pertinentes.
Datos oficiales revelan que Padilla ingresó a laborar en la Prefectura de Pichincha en 2019 y que su contratación se realizó siguiendo todos los procesos legales establecidos.
Asimismo, se destacó que se ha proporcionado a la Contraloría y la Fiscalía “todos los documentos que reflejan las funciones asignadas y el trabajo realizado hasta agosto de 2023”.
El caso de Soledad Padilla surgió a raíz de la divulgación de audios que insinuaban posibles irregularidades durante su desempeño en la función pública.
Paralelamente, en la Fiscalía se encuentra un proceso abierto a raíz de una denuncia que Padilla presentó contra el exvicepresidente Jorge Glas, con quien trabajó como asesora, acusándolo de intimidación. A su vez, Glas también ha interpuesto una denuncia por extorsión.
Recientemente, se llevó a cabo una audiencia por el caso de intimidación en la que se esperaba la declaración de Luisa González, Marcela Aguiñaga y Paola Cabezas, aunque ninguna de ellas compareció ante la diligencia judicial.
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