La reciente solicitud de juicio político dirigida a la fiscal Diana Salazar desde el correísmo en la Asamblea ha desencadenado una oleada de reacciones y tensiones políticas en Ecuador. Uno de los principales actores en este escenario ha sido el expresidente Rafael Correa, quien no ha vacilado en expresar su punto de vista sobre este proceso.
A través de su cuenta en la red social X, Correa hizo referencia de manera despectiva a la funcionaria, refiriéndose a ella como “la 10/20”. Además, mencionó un supuesto acto de chantaje al afirmar que “nos mandó a decir que si sale el juicio político se van enseguida presos Paola Pabón y Jorge Glas”.
La respuesta de Salazar no se hizo esperar. En esa misma red social, la fiscal desmintió categóricamente dicha información: “En mi escala de valores no está contactar, amenazar, ni conversar con sentenciados ni prófugos de la justicia. Les aseguro que quien vaya ‘supuestamente’ de mi parte los está engañando.”
El conflicto ha escalado con declaraciones de ambas partes. La Revolución Ciudadana, liderada por Correa, ha señalado que la agenda busca la destitución de la fiscal Salazar, acusándola de incumplir sus funciones en un momento de creciente inseguridad en el país. Sin embargo, desde la Fiscalía se argumenta que el proceso político carece de fundamentos y se plantea como un intento de buscar impunidad, especialmente en casos ya sentenciados o en proceso de resolución penal.
La institución fiscal también ha señalado que estos ataques no son nuevos, afirmando que se han intentado posicionar discursos provenientes de sentenciados, familiares o partidarios, con la clara intención de desacreditar las pruebas presentadas en los tribunales. La Fiscalía insiste en que estos intentos han sido refutados con pruebas contundentes.
Hasta el momento, la mayoría de bancadas en la Asamblea se han opuesto al juicio político contra la fiscal Salazar. Partidos como Construye, el Partido Social Cristiano (PSC) y Gente Buena han rechazado la solicitud del correísmo. Incluso, Eckenner Recalde, de la Acción Democrática Nacional (ADN), partido del presidente Noboa, ha expresado su negativa a apoyar esta solicitud.
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