Stéphane Bancel, director general de Moderna, ha revelado a AFP que la vacuna experimental de la compañía contra el melanoma podría estar disponible en apenas dos años, marcando un hito crucial en la lucha contra la forma más agresiva de cáncer de piel en seres humanos. En un año en el que se registraron a nivel global 325,000 nuevos casos y 57,000 muertes por esta enfermedad, este avance supone una esperanza significativa.
Estas vacunas terapéuticas, a diferencia de las convencionales, no previenen la enfermedad, sino que la tratan al adiestrar el sistema inmunológico para combatirla. Bancel las ha descrito como una “inmunoterapia 2.0”, destacando su potencial en la oncología actual.
Los recientes resultados de los ensayos clínicos han impulsado los proyectos de Moderna. En uno de estos estudios con 157 pacientes de melanoma avanzado, la vacuna combinada con el fármaco Keytruda de Merck redujo el riesgo de recaída o muerte en un 49% en tres años, en comparación con la administración exclusiva de Keytruda.
La tecnología del ARN mensajero (ARNm), efectiva en formas graves de COVID-19, también se ha demostrado eficaz en este contexto. Bancel señaló que la diferencia en la supervivencia entre la vacuna de Moderna y el mejor producto disponible actualmente es significativa en oncología.
La aprobación temprana podría basarse en los ensayos clínicos actuales, mientras que un estudio más amplio, de “fase 3”, con mil participantes programado para 2024, podría confirmar la autorización previa.
Tanto la FDA como la Agencia Europea de Medicamentos han puesto la terapia en una vía de revisión acelerada, destacando el potencial innovador de esta técnica individualizada que comienza con la secuenciación genómica del tumor de cada paciente.
Moderna está ampliando sus horizontes, con planes de iniciar ensayos de “fase 3” para una vacuna de ARNm contra el cáncer de pulmón y la exploración de tratamientos para otros tipos de tumores. Además, esperan combinar estas vacunas con “biopsias líquidas”, pruebas sanguíneas que detectan señales de tumores, para una detección temprana y efectiva. Otras empresas, como BioNTech, también están trabajando en vacunas terapéuticas personalizadas contra el cáncer.