El Aeropuerto Internacional King Fahd, ubicado en Dammam, Arabia Saudita, es el más grande del mundo en términos de tamaño, abarcando 776 km², casi del mismo tamaño que Nueva York. Recibe anualmente alrededor de 12 millones de pasajeros.
Nombrado en honor al rey Fahd bin Abdulaziz Al Saud, este aeropuerto comenzó su construcción en 1983 sin la intención inicial de ser el más grande, pero con el tiempo, expansiones y remodelaciones lo han convertido en una gigantesca terminal aérea. Se proyecta su expansión hasta el 2038 para manejar a 16 millones de pasajeros anualmente.
Aunque solo el 5,6% del espacio total del aeropuerto es ocupado por edificios, este cuenta con una terminal principal de seis niveles y una exclusiva Terminal Real para la familia real y personalidades VIP. Ofrece una amplia gama de instalaciones, desde restaurantes, bancos y tiendas hasta bibliotecas y salas de conferencias.
Con dos pistas paralelas de 4,000 metros de largo y 60 metros de ancho cada una, el aeropuerto puede manejar el despegue y aterrizaje simultáneo de grandes aviones. Además, cuenta con un estacionamiento con capacidad para 4,500 vehículos.
Destaca también su capacidad de producción de comidas, generando diariamente 8,000 platos para pasajeros y 1,000 para empleados del aeropuerto, incluyendo 300 platos para el exclusivo Royal Pavilion. Este aeropuerto se ha convertido en un coloso que combina lujo, eficiencia y tamaño para atender las necesidades de un gran número de pasajeros cada año.