La Asamblea Nacional de Ecuador, bajo la presidencia del legislador del Partido Social Cristiano, Henry Kronfle, ha sido sometida a un examen minucioso por parte del Observatorio Legislativo durante los primeros 100 días de su gestión. Este análisis comparativo se ha llevado a cabo en relación con el desempeño legislativo durante el mismo período de la Asamblea anterior, electa para el período 2021-2023.
El informe del Observatorio destaca la notoria agilidad con la que la Asamblea actual ha abordado el tratamiento de leyes, así como su papel crucial en la fiscalización y legislación. Este reconocimiento resalta la eficiencia y dinamismo con el que el actual cuerpo legislativo ha venido desempeñando sus funciones en este corto lapso de tiempo.
Sin embargo, no todo son halagos en este informe. Además de resaltar los aspectos positivos de la gestión, el Observatorio también ha señalado a los asambleístas que han registrado la mayor cantidad de ausencias en las sesiones durante el período 2023-2025. Esta lista, que ha sido denominada como “los más faltones”, está encabezada por Carlos Paúl Aulla Llerena (I), quien ha acumulado un alarmante 42% de ausencias, faltando a 64 de las 112 sesiones en las que se requería su voto.
Sorprendentemente, el propio presidente de la Asamblea Nacional, Henry Kronfle, figura en esta lista con un preocupante 62% de ausencias, lo que equivale a no haber estado presente en 40 de las sesiones convocadas. Este dato resulta especialmente llamativo, considerando el liderazgo que Kronfle ostenta en la institución.
Asimismo, otros destacados legisladores también se han ubicado en esta lista por su alto índice de ausencias. Entre ellos se encuentran Sofía Espín, representante de la Revolución Ciudadana, Jorge Luis Guevara, del oficialismo, y Ana Galarza, perteneciente al Movimiento Construye. Todos ellos han registrado una tasa de ausencia superior al 64%, lo que ha generado preocupación entre la opinión pública y ha desatado debates sobre la responsabilidad y compromiso de los representantes electos con sus deberes legislativos.
Este informe del Observatorio Legislativo arroja luz sobre la compleja realidad política del país, resaltando tanto los logros como las deficiencias en el funcionamiento de uno de los poderes del Estado más importantes de Ecuador. En este sentido, se espera que estas revelaciones impulsen un debate más profundo sobre la rendición de cuentas y la transparencia en la función pública, elementos fundamentales para fortalecer la democracia y garantizar el cumplimiento de los derechos ciudadanos.