El Gobierno de Ecuador ha tomado la decisión de declarar persona non grata a la embajadora de México en Quito, Raquel Serur, como respuesta a los comentarios realizados por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. En sus declaraciones, López Obrador sugirió que el actual presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, ascendió como candidato en las elecciones gracias al asesinato de su rival Fernando Villavicencio, un crimen atribuido al crimen organizado.
La Cancillería ecuatoriana emitió un comunicado explicando que esta medida está contemplada en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y que implica la pronta partida de la embajadora mexicana del país. Sin embargo, aclararon que esta acción no significa una ruptura de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
El presidente Noboa respondió a los comentarios de López Obrador, señalando el impacto negativo que estos tienen en la sociedad ecuatoriana, aún afectada por el asesinato de Villavicencio. La Cancillería ecuatoriana enfatizó que el país se encuentra en un período de duelo por dicho acontecimiento, el cual conmocionó a la nación y representó un atentado contra la democracia y la seguridad.
Este impasse diplomático surge un mes después de que Ecuador solicitara a México el ingreso a su embajada en Quito para capturar al exvicepresidente Jorge Glas, quien se encuentra refugiado allí desde diciembre pasado para evitar ser encarcelado por corrupción durante el Gobierno de Rafael Correa. México se negó a permitir el ingreso de la policía ecuatoriana, alegando que violaría la inmunidad diplomática de la embajada.
La Cancillería mexicana, representada por Alicia Bárcena, ha afirmado que están evaluando la solicitud de asilo de Glas y que están investigando si su caso se trata de una persecución política o un problema legal de corrupción. Sin embargo, hasta el momento, México no ha otorgado ni denegado el asilo solicitado por Glas. La situación entre ambos países se mantiene en tensión mientras se espera una posible resolución diplomática.