El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha anunciado que solicitará a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) “medidas cautelares” en favor del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien fue detenido esta madrugada tras una incursión policial en la Embajada de México en Ecuador. Esta operación ha desencadenado la ruptura inmediata de las relaciones diplomáticas entre Ecuador y México.
“Colombia promoverá una acción para que la CIDH expida medidas cautelares en favor de Jorge Glas, al que se le violó de manera bárbara su derecho al asilo”, anunció Petro en su cuenta de la red social X.
Además, el mandatario colombiano ha instado a una reunión de urgencia de la Organización de Estados Americanos (OEA) “para examinar la ruptura de la convención de Viena por un estado miembro”, refiriéndose a la entrada de la Policía ecuatoriana en la misión diplomática mexicana.
Por su parte, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha defendido la incursión policial argumentando que la condena previa contra Glas prevalece sobre su condición de asilado político, cuya validez fue cuestionada por el mandatario ecuatoriano.
“Ningún delincuente puede ser considerado un perseguido político”, señaló Noboa en un comunicado tras la operación policial.
Cabe destacar que Glas se encontraba desde mediados de diciembre en la sede diplomática mexicana, argumentando temor por su seguridad y libertad personal. La Embajada lo acogió como huésped luego de que la Policía Nacional ordenara su detención por el caso de posible malversación de caudales públicos en la reconstrucción de la provincia de Manabí tras el terremoto de 2016.
Las declaraciones de Petro, que rechazan las acciones del Gobierno de Daniel Noboa, se suman a los respaldos explícitos que los Gobiernos de Venezuela, Cuba y Honduras ya han manifestado a favor de México.
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