Un tribunal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) dictaminó este viernes, 12 de abril de 2024, que la detención del exvicepresidente Jorge Glas en la Embajada mexicana fue “ilegal y arbitraria”, aunque rechazó su solicitud de liberación. La decisión se dio al finalizar la audiencia sobre un habeas corpus presentado por la defensa de Glas, quien también solicitaba su retorno a la misión diplomática o a la Embajada de otro país que garantice su asilo.
El tribunal confirmó su competencia argumentando que la orden de localización y captura de Glas se emitió el 5 de enero de 2024 en Quito por el caso Reconstrucción de Manabí, sin encontrar vulneraciones de formalidades.
En cuanto a las partes involucradas, el tribunal no aceptó la solicitud de los abogados del presidente de la República y de la ministra de Gobierno para ser excluidos como accionantes pasivos, a diferencia de la jueza de Garantías Penitenciarias.
Respecto a la orden de prisión preventiva, se determinó que se ajustó a lo establecido por la ley para asegurar la presencia de Glas en el proceso penal, debido a evidencias de supuesto peculado, delito con penas de 10 a 13 años. Igualmente, se consideró que la orden de localización y captura se ajustó a la normativa legal.
Sin embargo, la detención en la Embajada de México en Quito fue considerada ilegal y arbitraria al no existir una orden de allanamiento que justifique la detención, ni justificación por el decreto de conflicto armado interno. A pesar de ello, Glas permanecerá en prisión debido a otras dos sentencias ejecutoriadas en su contra.
Respecto al asilo, el tribunal indicó que no le corresponde pronunciarse, dejando esta decisión a las autoridades diplomáticas.
El exvicepresidente relató haber sido agredido por policías durante su detención en la delegación diplomática, lo que le habría causado lesiones. Glas denunció ser perseguido político tanto por el actual gobierno como por administraciones anteriores.
Por otro lado, se informó que Glas sostendría una reunión con el cónsul de Alemania el mismo día de la audiencia. El político tiene nacionalidad alemana y ecuatoriana, y las autoridades alemanas expresaron interés en conocer su situación legal y personal. Tras su captura en la embajada, Glas fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad La Roca en Guayaquil.
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