El mercado del cacao ha experimentado un drástico descenso este martes, con una caída de más del 13% en su precio, lo que lo sitúa por debajo de la marca de los 10.000 dólares por tonelada. Hasta el fin de semana, el precio del quintal de cacao se encontraba en un rango entre 420 y 470 dólares, pero el martes cayó abruptamente a 350 y 320 dólares, dependiendo de cada comprador. Este desplome se atribuye principalmente a un exceso de oferta en el mercado internacional.
Desde principios de abril, los precios del cacao habían mantenido un récord de más de 10.000 dólares por tonelada, alcanzando un punto máximo el 26 de marzo. Sin embargo, la “exuberancia” en torno a esta materia prima ha ido disminuyendo gradualmente, llevando a una estabilización del mercado y, en última instancia, a esta caída significativa.
Los futuros en Estados Unidos comenzaron el día con un declive del 4,5%, profundizándose a lo largo de la sesión y culminando con una caída intradía del 17%, aunque posteriormente se recuperó ligeramente hasta alcanzar un -13,73%. Esto dejó el precio del cacao en 9.139 dólares alrededor de las 13:30 hora local de Nueva York. Para poner en perspectiva esta cifra, hace apenas un año, el precio era de alrededor de 2.900 dólares por tonelada.
Este descenso se produce en un contexto en el que el número de contratos en circulación sigue disminuyendo y los requisitos de margen para su negociación están en aumento. Además, recientes lluvias en África occidental, la principal zona productora de cacao, podrían aliviar ligeramente el suministro de esta materia prima.
Sin embargo, países como Ghana ya han tenido que retrasar sus entregas en las últimas semanas debido a la escasez de granos de cacao y las dificultades para cumplir los contratos en temporadas anteriores debido a una menor recolección. Costa de Marfil también ha pedido a los compradores que esperen hasta mediados de la cosecha para mitigar la escasez.
A pesar de la posible relajación en los precios, la elevada cotización del cacao podría traducirse en un aumento del costo del chocolate a lo largo del año. Esto ha llevado a algunos fabricantes a reducir el tamaño de las barras comercializadas o a promover variedades con ingredientes alternativos para contener el encarecimiento. Además, la entrada en vigor de normas de la Unión Europea destinadas a impedir la comercialización de productos que contribuyan a la deforestación podría comprometer aún más el suministro de cacao en el futuro.
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