Mientras la presencia de la alcaldesa Diana Caiza en medios nacionales es notable, en los medios locales, donde se refleja la realidad diaria de la ciudad, su ausencia es evidente. Esta situación plantea una serie de interrogantes sobre su capacidad y disposición para enfrentar los problemas que aquejan a Ambato.
La preferencia de Caiza por los medios nacionales ha sido interpretada por muchos como un intento de vender una imagen distorsionada de la realidad. En estas plataformas, la alcaldesa presenta una versión edulcorada de su gestión, destacando logros y proyectos sin mencionar las dificultades cotidianas que enfrenta la ciudad. Una idea que carece de contexto y profundidad, no se alinea con la realidad de los ciudadanos que ven, día tras día, los problemas sin resolver en su entorno.
La falta de valentía de la alcaldesa para enfrentar a los medios locales pone en evidencia su incapacidad para aceptar sus errores. En especial con aquellos medios que no se dejan vender por la pauta. Preguntas incisivas y reportajes críticos forman parte del trabajo de periodistas, quienes exigen respuestas concretas y soluciones efectivas. La ausencia de Caiza en estos espacios sugiere una falta de disposición para enfrentarse a la dura realidad y a las críticas constructivas.
La ciudad de Ambato, enfrenta desafíos significativos, la evasión de estos problemas no hace más que agravar la situación, generando una brecha cada vez mayor entre el gobierno municipal y los ciudadanos. La actitud soberbia de la autoridad no solo disminuye su credibilidad, sino que también apaga la confianza de la ciudadanía en sus líderes.
La valentía para enfrentar los problemas y la disposición para escuchar y dialogar con todos los sectores de la prensa son cualidades indispensables para cualquier líder. Si Caiza desea recuperar la confianza de Ambato, debe empezar por demostrar que no teme a la verdad y que está comprometida con el bienestar de su ciudad, más allá de las apariencias, los escenarios nacionales y la vanidad.
#EDITORIAL
Por: Johanna Cahuana