La tragedia en el sector de Río Verde, provocada por un deslave masivo, ha dejado un saldo de 13 muertos confirmados hasta el momento. Equipos de rescate y la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) continúan en la zona, donde una persona sigue reportada como desaparecida.
El deslave ocurrió el pasado lunes, 17 de junio, tras intensas lluvias que azotaron la región. La masa de tierra y escombros sepultó varias viviendas y vehículos, atrapando a residentes y transeúntes en su paso.
Las labores de rescate, encabezadas por la Dinased, junto con bomberos y personal de la Cruz Roja, han sido intensas y continúan sin descanso. La prioridad es localizar a la persona desaparecida y asegurar que no haya más víctimas bajo los escombros.
El ministro de Gobierno, Juan Carlos Rivera, expresó su pesar por la tragedia y aseguró que se están utilizando todos los recursos disponibles para las labores de rescate. “No descansaremos hasta encontrar a la persona desaparecida y asegurar la seguridad de los sobrevivientes,” afirmó Rivera en una rueda de prensa esta tarde.
La comunidad local está conmocionada por el desastre. Organizaciones no gubernamentales y grupos de voluntarios se han movilizado para ofrecer ayuda a los afectados. Además, el Gobierno ha dispuesto asistencia humanitaria para las familias que han perdido sus hogares y seres queridos.
Las autoridades han emitido alertas de precaución para otras áreas vulnerables a deslaves y han recomendado a los ciudadanos mantenerse alejados de zonas de riesgo. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) continúa monitoreando las condiciones climáticas para emitir avisos oportunos.
El esfuerzo de búsqueda y rescate continuará mientras exista la posibilidad de encontrar más sobrevivientes o víctimas. Se ha solicitado a la población colaborar con las autoridades y reportar cualquier indicio que pueda ayudar en las labores de rescate.
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