El pasado sábado 29 de junio de 2024, las Fuerzas Armadas del Ecuador identificaron una serie de túneles en el Centro de Privación de Libertad de Cotopaxi. Estos conductos, ubicados en la prisión de Latacunga, permitían tanto la conexión interna entre los pabellones de mínima y mediana seguridad como una posible salida al exterior de la cárcel.
Según las autoridades, los túneles eran utilizados para facilitar el ingreso de armas de fuego, contribuyendo a la violencia y matanzas registradas en el centro de detención. Las imágenes proporcionadas por las Fuerzas Armadas muestran que estos canales son lo suficientemente amplios para permitir el tránsito de personas y están cubiertos con un material que parece cemento. Una de las entradas, oculta entre la hierba, sugiere un intento deliberado de camuflaje.
Aunque el estado de excepción que permitía el control militar en las cárceles del país ya no está vigente, la declaratoria del conflicto armado interno aún otorga ciertas facultades a las Fuerzas Armadas para actuar en estos recintos penitenciarios.
Este hallazgo se suma a las recientes denuncias sobre el manejo de las cárceles en Ecuador, donde se ha informado que los cabecillas de mafias asignan celdas a los presos, ignorando las órdenes judiciales.
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