La niñez y juventud con dificultades en el aprendizaje pueden acudir a este centro de apoyo psicopedagógico, para mejorar su capacidad de gestión de los pensamientos, sentimientos y la interpretación de las experiencias, con el fin de adaptarse al medio.
En Ambato se inauguró el primer Eco Campus de Psicopedagogía. El pasado lunes 1 de julio luego de 15 años de trabajo en el centro de la ciudad, Tiempo de Aprender inició una nueva etapa de servicio en su propia infraestructura en Izamba, a unos 10 minutos de la urbe.
“Nuestra experiencia de servicio a niños, jóvenes y adultos posibilita identificar necesidades particulares para el aprendizaje de las personas, y para atenderlas, estamos en continua especialización para aplicar terapias que complementan eficazmente el fortalecimiento de las capacidades de cada uno” afirmó Gimena Paredes, directora de Tiempo de Aprender.
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Esta institución comenzó como un proyecto de Gimena Paredes Ríos, directora y facilitadora del Método Davis Dyslexia Association International, de Talleres de propósitos de vida y mindfulness, y quien estudió su máster, especializaciones y diplomados en Psicopedagogía, Educación, Gestión de Competencias, Gerencia Educativa, Mindfulness para niños y adolescentes en las universidades de Barcelona, Pedagógica Frank País García de Cuba, Andina Simón Bolívar y Central del Ecuador y en la Escuela Española de Desarrollo Transpersonal.
El establecimiento cuenta con atención psicológica clínica y atención a niños con autismo, por lo que el director de la Red Ecuatoriana de Pedagogía, Josué Abacuc destacó la importancia de los servicios de Tiempo de Aprender, durante su visita a las nuevas instalaciones:
“En el país, tres de cada 10 niños tienen alguna necesidad especial en su proceso de aprendizaje, y el trabajo en el sistema escolar público y privado no siempre permite atender esos casos que precisan de especialidades psicopedagógicas, por ello es imprescindible que espacios como Tiempo de Aprender continúen en su labor y colaboren con los docentes de ambos sectores”.
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Durante 15 años de trabajo, son diversas las historias de vida de quienes que han cursado Tiempo de Aprender y los testimonios tienen en común, felicidad, realización, éxito y crecimiento:
“Entre mis hermanos hay IQ muy altos, yo me sentía frustrado porque notaba que me tardaba en entender ciertas cosas, vine a Tiempo de Aprender y la evaluación determinó que tenía un grado de dislexia, entonces empezó mi proceso, cambié a un estado de autoconfianza, vi mi desarrollo y cómo aprender ya me resultaba agradable y lo entendía” relató Diego Naranjo, de 20 años de edad, estudiante de ingeniería de la Universidad Técnica de Ambato.
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Esta entidad de apoyo psicopedagógico amplió sus servicios y actualmente atiende con un equipo de 12 profesionales especializados en Dislexia y TDAH; Evaluación psicopedagógica; Evaluación e intervención de Autismo; Apoyo emocional- clínico; Terapia de Lenguaje; Desarrollo Neuropsicológico y; Refuerzo pedagógico.
El inaugurado Eco Campus de Tiempo de Aprender consta de salas de trabajo, consultorios, salones de terapia y juegos, jardines, área de horticultura, meditación, legoterapia, arte-terapia, etc.: “Los niños con dificultades de aprendizaje requieren de apoyo profesional especializado que los orienten como desarrollar habilidades de autorregulación, que les permita analizar el entorno, responder, modular la respuesta emocional y por supuesto superar las dificultades no solo en el aula, sino en otros ámbitos de su vida” afirmó el experto, Josué Abacuc.
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