La canciller Gabriela Sommerfeld sabrá esta semana si se mantiene al frente del Ministerio de Relaciones Exteriores o si es censurada y destituida, como pretende la bancada correísta de la Revolución Ciudadana. Tres bancadas han mostrado su oposición al proceso, que se decidirá el 8 de agosto.
El presidente de la Asamblea Nacional, Henry Kronfle, ha convocado para las 09:30 del jueves 8 de agosto de 2024 una sesión para conocer el informe de posturas enviado por la Comisión de Fiscalización. La ministra Sommerfeld se defendió ante esta comisión el pasado 26 de julio, pero no hubo consenso para aprobar el informe elaborado por su presidenta, Pamela Aguirre, de la bancada correísta. Este documento recomendaba continuar con el juicio político, censurar y destituir a Sommerfeld.
La votación en el Pleno de la Asamblea Nacional será decisiva. Bancadas como la del Partido Social Cristiano (PSC), Construye, la oficialista Acción Democrática Nacional (ADN) y algunos independientes han señalado que no apoyan el proceso en contra de la ministra. El Pleno decidirá cuál de los informes acoge y si continúa con el proceso en contra de la canciller.
La asambleísta correísta, Jhajaira Urresta, acusa a Sommerfeld de estar detrás de la incursión policial a la Embajada de México en Quito el 5 de abril, donde se detuvo al exvicepresidente Jorge Glas. También la señala de no haber facilitado el salvoconducto a Glas, que tiene sentencias e investigaciones por corrupción, para que viaje a México, país que le concedió asilo político.
Otra causal para el juicio político es la tensión diplomática que generó con Rusia el anuncio de que el Gobierno de Daniel Noboa entregaría “chatarra rusa” a Estados Unidos a cambio de equipo nuevo de seguridad.
El desenlace de este juicio político podría tener importantes implicaciones para el Gobierno y la estabilidad política del país. La ciudadanía y los observadores políticos estarán atentos a la votación del jueves, que definirá el futuro de la canciller Sommerfeld.