El ministro de Energía, Antonio Gonçalves, anunció que la barcaza turca entrará en operación el próximo lunes 26 de agosto de 2024, agregando 100 megavatios (MW) al sistema eléctrico integrado de Ecuador. Este refuerzo energético es crucial para mitigar la crisis que afecta al país, especialmente ante la amenaza de nuevos apagones.
En una entrevista concedida a Teleamazonas, Gonçalves reconoció que, aunque están trabajando arduamente para evitar cortes de energía, no se puede descartar la posibilidad de apagones en el futuro cercano. “Estamos monitoreando constantemente los caudales de los embalses y tomando en cuenta la restricción de venta de energía desde Colombia. Hacemos todo lo posible para que estos cortes no ocurran, pero dada la situación hidrológica, no hay garantías”, advirtió el ministro.
Además de la barcaza que entrará en funcionamiento en Guayaquil, Gonçalves reveló que se está gestionando la contratación de una o dos barcazas adicionales, también para enfrentar el estiaje que se espera a partir de septiembre de 2024. Estas nuevas barcazas se ubicarían en Las Esclusas, Guayaquil, y se espera que la primera llegue en noviembre de este año.
Para acelerar el proceso, el Ministerio de Energía ha abierto una plataforma de ofertas, donde se dará prioridad a aquellas que garanticen soluciones inmediatas a la crisis energética. El objetivo es cubrir un déficit de 750 MW, combinando compras y alquileres, y así evitar que la situación se agrave.
Estrategias adicionales para enfrentar la crisis energética
En paralelo a estas medidas, Gonçalves anunció el lanzamiento de una campaña de eficiencia energética que busca reducir el consumo en hogares, comercios e industrias. Esta campaña ofrecerá incentivos, como descuentos en las tarifas eléctricas para quienes logren disminuir su consumo. Además, se solicitará el apoyo del sector privado para que enciendan sus generadores durante las horas pico, liberando así carga para el sistema general.
Gonçalves subrayó que la actual crisis energética en Ecuador es parte de un problema regional, exacerbado por la falta de planificación en la transición energética. A pesar de esto, aseguró que el Gobierno ya ha implementado medidas a mediano plazo para cubrir con éxito esta crisis, que se espera dure entre dos y tres años. También destacó la importancia de atraer inversiones para desarrollar plantas geotérmicas que fortalezcan la soberanía energética del país.
La situación en Ecuador refleja un desafío regional en la gestión de recursos energéticos, y las acciones que se tomen en los próximos meses serán determinantes para estabilizar el sistema eléctrico y asegurar un suministro constante de energía.