El salario promedio pretendido por los ecuatorianos mostró una tendencia al alza en julio de 2024, alcanzando los USD 835, según el último informe del Índex de Multitrabajos. Este incremento refleja una ligera recuperación del mercado laboral, evidenciando un optimismo creciente entre los trabajadores respecto a sus expectativas salariales.
Desarrollo: En junio de 2024, la aspiración salarial promedio se situaba en USD 832, lo que marca una mejora mensual del 0,36%. Este crecimiento, aunque modesto, es significativo en un contexto económico desafiante, indicando que los ecuatorianos están comenzando a exigir más por sus habilidades y experiencia.
Por segmentos de trabajo, los roles de jefe o supervisor registraron un salario promedio pretendido de USD 1.155 en julio, apenas un 0,20% más que el mes anterior. En tanto, los puestos senior y semisenior mostraron un incremento del 0,57%, fijando su aspiración en USD 872. Los niveles junior, por su parte, experimentaron la mayor subida, con un 2,16%, alcanzando los USD 549.
Impacto y Relevancia: El repunte en las aspiraciones salariales es un indicador clave de la reactivación del mercado laboral ecuatoriano. Según Jeff Morales, gerente de Marketing de Multitrabajos, “la tendencia al alza en los salarios pretendidos sugiere que los trabajadores están percibiendo una mejora en las oportunidades de empleo y están dispuestos a negociar mejor sus remuneraciones.”
Perspectiva Sectorial: Dentro de los distintos sectores, Marketing y Comunicación lideró el crecimiento anual con un incremento del 6,72% en los salarios requeridos. Por otro lado, el sector Comercial mostró el menor avance, con un crecimiento del 1,63%. Estos datos reflejan la dinámica cambiante del mercado laboral, donde áreas tecnológicas y creativas están en auge, mientras que sectores tradicionales avanzan a un ritmo más lento.
Brecha de Género: Un aspecto preocupante revelado por el informe es la persistente brecha de género en las aspiraciones salariales. Los hombres solicitaron en promedio USD 865, mientras que las mujeres pidieron USD 785, lo que deja una diferencia del 10,26% a favor de los varones. Además, la participación de mujeres en posiciones de mayor responsabilidad sigue siendo limitada, lo que plantea desafíos en términos de equidad laboral.
Conclusión: El aumento en las aspiraciones salariales es un signo alentador de recuperación, pero también pone de manifiesto la necesidad de políticas más inclusivas y equitativas en el ámbito laboral. Con un mercado en constante evolución, las expectativas salariales seguirán siendo un indicador crucial para evaluar la salud económica del país.