El Ministerio de Energía ha prorrogado hasta el 30 de noviembre el contrato de administración del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), marcando la tercera extensión desde su fecha original de vencimiento, que era el 20 de enero. La infraestructura, afectada por la erosión del Río Coca y con varios problemas de rotura, había recibido anteriormente dos extensiones adicionales, hasta el 19 de agosto y luego hasta noviembre.
El Gobierno está en proceso de negociar las condiciones para la reversión del oleoducto al Estado, lo que incluye evaluar el correcto funcionamiento de la infraestructura. El Ministerio de Energía considera una propuesta del OCP para rediseñar el trazado del oleoducto, con el fin de evitar la erosión del río. Este nuevo trazado, de 45 kilómetros y una inversión de USD 120 millones, se construirá en el sector del Alto Coca y pasará por el mismo corredor proyectado para una carretera hacia Lago Agrio y el Oleoducto Transecuatoriano.
Actualmente, los estudios están en curso. El nuevo trazado permitirá que la tubería recupere su diámetro original de 34 pulgadas, en lugar de los 20 pulgadas actuales, restaurando su capacidad de transporte de 450,000 barriles diarios a su capacidad inicial.
Además, la transnacional argentina Pampa Energía, que recientemente adquirió el 36% de participación en el OCP por USD 23 millones, ahora posee el 100% del oleoducto, finalizando así la sociedad con otras empresas que lo construyeron desde 2001.
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