Las empresas privadas en Ecuador ahora podrán fabricar armas, gracias a la nueva Ley de Armas aprobada por la Asamblea el pasado martes, que está por entrar en vigencia. Esta ley autoriza la instalación de fábricas de armamento en el país, aunque mantiene la prohibición de producir armas artesanales, algo establecido desde 2012 tras operativos en talleres de fabricación en Chimbo, provincia de Bolívar.
Las armas fabricadas legalmente deberán cumplir con estrictos controles: estarán marcadas con las iniciales del país, el fabricante, un número de serie, y deberán registrarse ante las Fuerzas Armadas. Timoshenko Alvaro, experto en seguridad, explicó la importancia de este control: “Tendré la capacidad de rastrear dónde se fabricó el arma, quién la fabricó, qué piezas se utilizaron, e incluso quién la compró.”
Hugo García, un técnico en armas interesado en instalar una fábrica, considera que la nueva ley impulsará la demanda, ya que también establece un marco para el porte civil de armas. “Esto generará empleo y soluciones, porque importar un arma toma demasiado tiempo. Además, podríamos exportar y expandir la producción local”, señaló.
Por su parte, el experto en seguridad Edison Romo subrayó la importancia de los controles que deberán ejercerse sobre las empresas que se encarguen de la fabricación. “Es fundamental que el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas realice inspecciones regulares, tanto avisadas como sorpresivas, para asegurar el cumplimiento de la ley”, dijo.
El reglamento que emitirá el Presidente de la República detallará los requisitos que los empresarios deberán cumplir. Asimismo, los interesados necesitarán un informe favorable del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas para poder instalar sus fábricas.
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