En las próximas horas, el gobierno de Daniel Noboa, a través de la Procuraduría General del Estado, estaría solicitando formalmente a la INTERPOL la emisión de una difusión roja contra el expresidente ecuatoriano Rafael Correa. Esta acción llega luego de que el Departamento de Estado de los Estados Unidos prohibiera su entrada al país por su “participación en actos de corrupción significativos durante su mandato público”, según un comunicado oficial.
La administración del presidente Joe Biden señala que Correa y otros exfuncionarios abusaron de sus cargos al aceptar sobornos, incluso mediante contribuciones políticas, a cambio de adjudicar contratos gubernamentales favorables. La sanción impuesta por Estados Unidos representa un golpe diplomático importante para el exmandatario, quien enfrenta múltiples acusaciones judiciales en Ecuador, incluido el caso “Sobornos 2012-2016”, por el cual fue condenado en ausencia.
La noticia sobre la posible solicitud de difusión roja fue reportada por varios medios digitales cercanos al gobierno de Noboa, quienes sostienen que esta medida busca agilizar la captura y extradición de Correa, quien ha evadido a la justicia ecuatoriana desde su salida del país. Pese a varios intentos fallidos de extradición y órdenes de arresto internacional, el exmandatario ha residido en Bélgica desde 2017, país que, hasta el momento, no ha procedido con su entrega.
Correa, por su parte, ha manifestado en repetidas ocasiones que vive feliz con su familia en Bélgica y ha tachado las acusaciones en su contra como persecuciones políticas. Sin embargo, esta nueva ofensiva diplomática, sumada a la prohibición de su ingreso a Estados Unidos, podría aumentar la presión internacional sobre su situación legal.
En los próximos días, se espera que la Procuraduría General del Estado formalice la solicitud a INTERPOL, buscando que la difusión roja sea emitida y que el exmandatario enfrente la justicia ecuatoriana.
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