El presidente Guillermo Lasso ha dado un último toque simbólico a su mandato al colgar su retrato en el Salón Amarillo del Palacio de Carondelet. Este óleo, que ahora se une a la colección de retratos de expresidentes ecuatorianos en dicho salón, fue instalado el jueves 16 de noviembre, marcando los últimos días del mandato de Lasso.
Con el término de su gobierno programado para el próximo miércoles 22 de noviembre, estos momentos finales han sido aprovechados por el presidente saliente para reconocer y condecorar a diversas figuras de importancia en el país. Asimismo, ha emitido un decreto relacionado con la seguridad de expresidentes y exvicepresidentes, una medida que él mismo eliminó al asumir el cargo y que ahora reincorpora antes de su salida del poder.
El ambiente en el Palacio de Carondelet está impregnado de una transición inminente. El jueves 23 de noviembre marca el ingreso oficial de Daniel Noboa como presidente de la República, sucediendo a Guillermo Lasso en este momento clave para Ecuador.
La colocación del cuadro de Lasso en el Salón Amarillo, junto a las figuras que representan la historia política del país, no solo simboliza el final de un período presidencial, sino que también marca el inicio de un nuevo capítulo en la historia de Ecuador con la llegada del próximo mandatario.
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